La Casa del Migrante de Saltillo: un refugio en el camino al sueño americano

SALTILLO, Coahuila.- En medio de los desafíos que enfrentan las personas en contexto de movilidad internacional en su paso por México, la Casa del Migrante de Saltillo, ubicada en la colonia Landín, se ha convertido en un refugio clave para quienes huyen de la violencia, la pobreza y la persecución. Desde su fundación en 2002, esta institución ha brindado asistencia humanitaria a miles de personas en tránsito hacia los Estados Unidos.

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 ¿Qué servicios ofrece?

 El albergue proporciona techo, comida, atención médica y apoyo legal a los migrantes que llegan a sus puertas. Además, ofrece acompañamiento psicológico y orientación para evitar abusos en su trayecto. Entre sus servicios destacan:

• Hospedaje temporal con camas y espacios seguros.
• Tres comidas diarias para los migrantes en tránsito.
• Atención médica básica y primeros auxilios.
• Asesoría legal para quienes buscan regularizar su situación migratoria o solicitar asilo.
• Apoyo psicológico para quienes han vivido experiencias traumáticas en su viaje.
• Información y prevención sobre riesgos en la ruta migratoria.

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¿Quiénes llegan a este refugio?

 La Casa del Migrante de Saltillo recibe a personas de diversas nacionalidades, principalmente de Honduras, El Salvador, Guatemala, Venezuela y Haití. Sin embargo, en los últimos años también han llegado migrantes de países africanos y asiáticos. Muchos han recorrido miles de kilómetros a pie, en autobuses o a bordo del tren conocido como “La Bestia”, enfrentando peligros como el crimen organizado, el abuso de autoridades y la xenofobia.

El albergue trabaja en conjunto con organizaciones de derechos humanos y la sociedad civil para denunciar abusos y violaciones a los derechos de los migrantes. A lo largo de los años, han documentado casos de extorsión, secuestro y violencia contra personas en tránsito. También han promovido acciones legales y campañas de sensibilización para mejorar las condiciones de quienes buscan una vida mejor.

 ¿Cómo se mantiene en funcionamiento?

 La Casa del Migrante de Saltillo opera gracias al apoyo de donaciones, voluntarios y organizaciones civiles. Diversos grupos religiosos, asociaciones de derechos humanos y ciudadanos comprometidos contribuyen con recursos y tiempo para que el refugio siga funcionando.

A pesar de los desafíos y las crecientes necesidades, este albergue sigue siendo un punto de esperanza para miles de personas que buscan una segunda oportunidad en la vida.

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