Carnes Ramos, Carnes San Juan o Alanís ¿Qué chicharrones conquistan el paladar saltillense?
Carnes Finas San Juan y Carnes Ramos se destacan por su calidad y distribución; Alanís de Saltillo por su sabor artesanal y auténtico.
SALTILLO, Coahuila.- En el norte de México, los chicharrones son más que un antojo: son una tradición. Entre Monterrey y Saltillo, esta delicia ha desatado una competencia amistosa por el paladar de los consumidores, quienes debaten si los mejores provienen de la capital regiomontana o si los tradicionales Alanís, 100% saltillenses, llevan la delantera.
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Monterrey y su sello inconfundible
Monterrey es conocido por sus marcas icónicas como Carnes Finas San Juan y Carnes Ramos, que ofrecen chicharrones crujientes y cargados de sabor. Estas empresas, con décadas de experiencia, han perfeccionado sus recetas, garantizando calidad y una consistencia que los consumidores adoran.
San Juan y Ramos suelen apostar por chicharrones ligeros, perfectos como botana o acompañamiento, con ese toque regio que encanta. Además, su distribución masiva en supermercados y tiendas especializadas los ha convertido en favoritos más allá de su región de origen.
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Alanís, un emblema de Saltillo
Por otro lado, Saltillo presume con orgullo los chicharrones Alanís, una tradición que lleva más de 100 años en el mercado. Fundados en 1918, Alanís es sinónimo de arraigo y autenticidad, ofreciendo un producto artesanal que conserva técnicas originales y un sabor que ha pasado de generación en generación.
Los Alanís no solo destacan por su calidad, sino por su historia. Este producto es un reflejo de la identidad saltillense y ha logrado mantenerse vigente, incluso frente a competidores con estrategias de mercadotecnia más modernas.
¿Cuál es el favorito?
La respuesta depende del gusto de cada persona. Quienes prefieren un chicharrón más industrializado y fácil de conseguir suelen inclinarse por las marcas de Monterrey. Sin embargo, quienes buscan un sabor más casero y una experiencia con tradición, difícilmente se resisten a los Alanís.
En esta rivalidad culinaria, no hay perdedores. Tanto los chicharrones regios como los saltillenses ofrecen una experiencia única, que demuestra por qué este antojo sigue siendo un símbolo del norte de México. La próxima vez que tengas oportunidad, prueba ambos y decide por ti mismo: ¿Monterrey o Saltillo?